En esta última celebración de la Pascua de San Marcelino
Champagnat se notó un ambiente que permitió apreciar que
el legado del Fundador aún persiste y lo mejor aún, que
vive en los más pequeños.
Por está razón, prepararon un hermoso acto
en homenaje a nuestro Santo que contó con la
participación de los alumnos y alumnas de primero a
sexto básico y la presencia del rector del colegio,
Pedro Díaz Cuevas, y el Hno. Andrés Tello, quien siempre
está presente en la sección demostrando la cercanía con
nuestros pequeños. Y no fue la excepción, por cuanto
dirigió unas significativas palabras.
En el Salón Hno. Fernando de la Fuente se
desarrolló el acto que se caracterizó principalmente por
las dramatizaciones. Primero, los niños y niñas de
tercero básico representaron la vida de San Marcelino y
su obra, que hasta el día de hoy existe. Luego, los
segundos básicos interpretaron la Poesía El niño
pastor escrita por la Tía Florencia Arqueros, y la
Canción de la Familia Marista.
Un numeroso coro, finalizó la celebración
con la interpretación de la canción La semilla de la
Valla que resume la vida de Marcelino desde sus
inicios. En esta oportunidad, acompañaron a sus hijos,
un grupo de apoderados que con mucho entusiasmo
siguieron cada momento del homenaje, pudiendo acercarse
más a Champagnat.
Mientras que la celebración de los alumnos
del Parvulario se realizó a las 10:30 horas, que junto a
los padres vivieron momentos muy emocionantes al ver
dramatizada la vida de San Marcelino por los alumnos de
kinder y prekinder: Además cantaron y revivieron los
momentos más importantes de la vida del fundador, para
dirigirse al patio a realizar un trabajo artístico sobre
el mismo tema. Todo esto, en un ambiente de cariño y
reconocimiento por el gran regalo que nos entregó el
Señor a través de la vida de Marcelino.
Nuestros alumnos y alumnas demostraron
sentir y vibrar con cada momento demostrando así como
Marcelino a pesar de los años sigue presente en cada uno
de ellos y motivando el quehacer de cada una de las
educadoras de la sección. Gracias Marcelino por el gran
legado que nos regalaste.